1 días / 1 noches
Desde 01/11/2023 hasta 31/03/2025
La montaña Huayna Picchu, Wayna Pikchu en quechua, (con una altitud de 2667 msnm) forma parte de las estribaciones orientales del macizo de Salcantay, en Cusco, Perú. Es parte de una gran formación orográfica conocida como Batolito de Vilcabamba, en la Cordillera Central de los Andes peruanos y es conocida principalmente por ser el telón de fondo de la mayoría de fotografías panorámicas de los restos arqueológicos incas de Machu Picchu. Sin embargo ella misma alberga también importantes restos arqueológicos relacionados con el famoso complejo inca.
La montaña del Huayna dispone de un camino muy empinado y estrecho, que incluye varios tramos con peldaños, escalinatas talladas en la roca viva y cables. El ascenso varía entre 45 a 60 minutos, dependiendo de la condición física de cada persona, tiene una altura de 2700 m y la ciudadela inca de Machu Picchu está a una altura de de 2400 m por lo que se asciende 300 m. Por su parte, en la montaña de Machu Picchu el camino es menos empinado y dispone de escaleras, por lo que es menos peligroso, pero esta montaña es más alta que el Huayna Picchu con una altura de 3200 m, con su cima a 800 m sobre la ciudadela inca de Machu Picch
Un camino que parte del extremo norte de Machu Picchu atraviesa la estrecha lengua de tierra que conecta las montañas Machu Picchu y Huayna Picchu. Luego el camino se bifurca. El ramal derecho asciende a la cima. Su construcción debió ser ardua y en extremo peligrosa: Es un camino muy empinado, estrecho, que incluye varios tramos con escalinatas talladas en la roca viva al borde mismo en la pared vertical de roca. Al final, y coronando el Huayna Picchu hay algunas construcciones menores, incluyendo una portada y una piedra labrada grande a modo de trono que se conoce como "Silla del inca". Pero lo más interesante aquí es la vista que se tiene de los restos arqueológicos del Machu Picchu y del río Urubamba al fondo del Cañón, cuyas aguas turbulentas se oyen tronar aún en un sitio tan elevado. El nevado Salcantay (sacralizado por los incas) es visible desde aquí como lo es también la curiosa alineación que existe entre el Huayna Picchu, la cumbre del Machu Picchu y el mencionado nevado que según Johan Reinhard es una de las principales razones por las que Machu Picchu fue importante en tiempos de Pachacútec (1438-1572).
Como dato adicional para aquellos que deseen llegar la cima, las autoridades locales sólo permiten el ascenso de un máximo de 400 personas en dos turnos de 200.1 Esto obedece al hecho de que el sendero de ascenso y la cima no albergan físicamente a más visitantes. El ascenso toma, para una persona promedio, entre 45 a 60 minutos.
El otro camino va hacia la parte posterior de la montaña y lleva hasta a uno de los más notables complejos de construcciones subterráneas de la región. Se trata de varias cuevas, algunas de las cuales han sido forradas (a una escala mayor que en el Mausoleo de Machu Picchu) con bloques de fina cantería que han sido tallados para encajar con precisión con los contornos irregulares de los grandes afloramientos rocosos que les sirven de techo. Los muros, de carácter claramente ornamental, incluyen falsas portadas y nichos trapezoides de doble y triple jamba. Si bien su función específica se desconoce, está claro que se trata de un conjunto de construcciones de élite por el esfuerzo que demandó hacerlas. Se cree que pudo tener usos funerarios y que todas las tumbas fueron saqueadas en algún momento de la historia de la región.2
El nombre "Templo de la luna" es arbitrario y no tiene respaldo arqueológico aunque se ha hecho popular entre los arqueólogos y los guías turísticos. Revela en todo caso el interés común por compararlo en calidad con otros edificios incas, como el "templo del sol" de Machu Picchu.
Llegar hasta allí toma aproximadamente una hora y media caminando desde la ciudad. Desde aquí parte otro camino cuesta abajo hacia el río Urubamba.
En su viaje a Machu Picchu tendrá la oportunidad de hacer senderismo por las montañas entre las que se encuentra construida la Ciudad Inca; el ascenso a estás montañas le permitirá ver la ciudad de Machu Picchu desde arriba. Ambas montañas necesitan de un boleto en especial, ambas ofrecen espectaculares vistas de Machu Picchu; la mayoría de personas pueden recorrer la montaña Machu Picchu, pero no todas pueden recorrer el Huayna Picchu, sepa por qué.
La montaña Huayna Picchu es la que aparece detrás de Machu Picchu en su clásica foto postal; sus senderos incas construidos a un lado de la montaña, pueden resultar aterradores para las personas con miedo a las alturas; estos circulan al lado de abismos de cientos de metros, son empinados y angostos; con algunas secciones en las que tendrá que sujetarse de cables de seguridad para equilibrarse; es un reto para cualquier persona. Si sufre de vértigo o no puede controlar su miedo a las alturas, será mejor que pase por alto está montaña. La montaña Machu Picchu, ofrece caminos menos empinados, más anchos y visualmente menos aterradores. Al reservar los Boletos Machu Picchu piense en todas las personas que vienen con usted, esta caminata es ideal si viene con niños o con personas de edad avanzada.
Los senderos de la montaña Machu Picchu le ofrecen largos períodos de tiempo sin ver a nadie; muy diferente a la montaña Huayna, en la que tendrá que esperar su turno para poder usar la ruta de acceso. Ambos caminos tienen casi la misma distancia (unos 2 km), sin embargo, la caminata a la cima del Huayna Picchu es más vertical que la Montaña Machu Picchu y le llevara menos tiempo.
La montaña Machu Picchu es una de las caminatas más asombrosas en Machu Picchu; sin embargo, si puede vencer su miedo a las alturas, le recomendamos reservar la montaña Huayna Picchu, es posible que su vida cambie por completo luego de llegar a la cima.
Tendrá que reservar 6 meses antes si desea uno de los 300 boletos disponibles para ascender la montaña Huayna Picchu. La caminata por la montaña Machu Picchu permite el ingreso de 800 personas cada día y el boleto puede ser reservado hasta con semanas de anticipación. Pero recuerde que en temporada alta, los tiempos de reserva deberán ser mayores, y tendrá que prever también, los boletos de tren, hoteles y demás. Boleto Machu Picchu + Huayna Picchu o Boleto Machu Picchu + Montaña, si ya sabe cuál es la montaña para usted, revise la disponibilidad.
El Huayna Picchu es la montaña que se ubica al norte del recinto arqueológico inca y a 2,720 metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m.) En su interior, se encuentra la Gran Caverna o Templo de la Luna, una edificación misteriosa en medio de dos cuevas. Desde la Ciudadela Inca se aprecia como una empinada cumbre de difícil recorrido y efectivamente lo es. En su interior los incas elaboraron escalinatas de piedra de complicadas inclinaciones. En algunos tramos, estas limitan con temibles precipicios. En la cima se aprecia como en ningún otro lugar toda la belleza geográfica de la Maravilla del Mundo. Pese a todo, la aventura es reconocida como una de las más increíbles del planeta. Cada año son más los turistas que se animan a vivir la adrenalina del Waynapicchu.
La subida – El recorrido es difícil. Se inicia con un ascenso leve por caminos de trocha. La primera dificultad es atravesar una enorme roca cuya única vía posible es una estrecha abertura. El ascenso prosigue por unas escalinatas de piedra de reducido espacio. A un lado limita con la pared de roca de la montaña y al otro un precipicio de varios metros de largo. La vista es aterradora. Sin embargo, si se vence el miedo se llega a la cima. Se estima que el ascenso toma 1 hora dependiendo del estado físico del turista.
Lo más alto – La cima del Waynapicchu es la recompensa perfecta del esfuerzo desplegado. Desde ese punto se aprecia la Ciudadela Inca y la naturaleza que lo rodea como en ningún otro lugar. Lo más alto de la montaña se encuentra 300 metros más elevado que el recinto arqueológico. Desde allí también se vislumbra el pueblo de Aguas Calientes, el río Vilcanota, el Putucusi y hasta el nevado Salkantay. Se cree que la cercanía con esta naturaleza y montañas fue la razón por la que se construyó Machu Picchu en ese lugar.
La bajada – El descenso es tan arduo como la subida. Se inicia por un camino diferente al ascenso. En un tramo existe un desvío que lleva a la Gran Caverna o Templo de la Luna. Las escalinatas de piedra también son estrechas y junto a precipicios. Estas se unen en un punto con el camino inicial de ascenso. Se estima que bajar desde la cima del Huayna Picchu toma 1 hora dependiendo de si se hace o no la visita al templo arqueológico.
En la parte final del ascenso al Waynapicchu existe un tramo denominado ‘las escaleras de la muerte’. Este sobrenombre es exagerado ya que en realidad nadie perdió la vida al caer de estas escalinatas. Estos deben su nombre a la verticalidad y dificultad del tramo. Se trata del último escollo antes de llegar a la cima del Waynapicchu. La sensación de vértigo y adrenalina en esta parte del camino es uno de los momentos más extremos de la subida.
El recorrido por la montaña Huayna Picchu es difícil y vertiginoso pero no realmente peligroso. En los tramos más complicados al borde de precipicios existen cuerdas de seguridad que ayudan a sobrepasarlos. Además hay personal calificado en asistir al turista que necesite algún tipo de apoyo y señalizaciones a lo largo de los senderos. Al inicio del camino es obligatorio registrar los datos personales de cada persona que ingresa y sale de la cumbre. De esta manera, las autoridades aseguran que todos los que ingresan, salen del lugar. El acceso solo está permitido a mayores de 12 años. La aventura no es recomendable a personas que le temen a las alturas o con problemas cardiacos.
En redes sociales y fórums de turismo como Facebook y Tripadvisor existe información variada sobre los peligros de la montaña Waynapicchu. La mayoría coincide en que el recorrido es difícil y aterrador pero no peligroso. Si se siguen todas las recomendaciones y medidas de seguridad el peligro es nulo. Sin embargo, existen casos de turistas que arriesgan su vida innecesariamente tomándose una fotografía cerca al precipicio o buscando camino fuera de los senderos permitidos. En esos casos se pueden producir accidentes.
TARIFA NO COMISIONABLE U$ 120 ENTRADA Y BUS DE SUBIDA Y BAJADA CONCETUR
REQUIERE RESERVA 90 DIAS ANTES DE SU REALIZACION
Salidas diarias
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